viernes, 24 de enero de 2014

LOS DIABLOS DE LUZÓN - Reto Fanzine 2013. La Gallina

Esperando ya la próxima llegada del CARNAVAL y escuchar el correcalles de los Diablos de Luzón (Guadalajara), espero que disfruten de mi relato para el Reto Fanzine 2013.




LOS DIABLOS DE LUZÓN


"Cuarenta días antes del equinocio de primavera, la tierra se abrirá y los Hijos de Luzbel emergerán dispuestos a levantar un trono donde reine su padre, que camina noctámbulo desde que fue desterrado del Cielo".             LIBRO IV de Jonás.


Queda poco tiempo. Cuando se ponga el sol tendremos que partir de nuestras casas y estar preparados, antes de las luces del alba.

Desde el principio de los tiempos nos enfrentamos a ellos dándoles muerte en una encarnizada batalla.

Los lusones, Hijos de Luzbel. Engendros de piel viscosa color betún armados con una descomunal cornamenta. Sombras que sólo encuentran luz en el blanco de sus dientes y ojos cuando vomitan alaridos de caos y destrucción. Cuerpo de hombre y cabeza de toro con rabo que termina en punta de flecha. Garras por manos y pezuñas donde debería haber pies. Músculos duros como piedras templados en las llamas del infierno, bajo la tierra de Luzón, lugar donde cayó su padre arrojado desde el Cielo.

Cada 100 años en Luzón, entre robles y marojos, las rocas se quiebran para verlos nacer. Nacidos con cien años de vida, con cien años de odio, con cien años de ansiado deseo de encontrarse con su padre para entregarle en la Tierra el reino que no pudo tener en el Cielo. Al nacer, sus gritos se hacen eco en barrancos y gargantas, son los llantos desgarrados del hijo que reclama a su padre.

Nosotros, los Hijos de Jonás, tenemos cuarenta noches para exterminarlos. Ese es el tiempo que nos dio nuestro padre. Cuarenta noches para matarlos a todos, o el sol nunca más volverá a salir. Después consumaremos con nuestras mujeres y tendremos a nuestros hijos que cuando cumplan mil lunas nos vencerán en un duelo a espada, un duelo a muerte. Si no lo lograsen, padre e hijo tendrán que morir por la misma espada. Sólo un Jonás que ha vencido a su padre puede vencer a un lusón, hijo de Luzbel.





Mi nombre es Jonás Layna. Hijo de Jonás. Nací en una cueva negra como el vientre de una ballena. Mi madre cortó con sus dientes mi cordón umbilical. Repté hasta su pecho y me alimenté con su leche hasta el primer eclipse solar. Entonces salí al mundo para ver mi primer sol. Jonás Layna, me llaman. Jonás, como el padre de toda nuestra estirpe; Layna, como mis ancestros, el nombre grabado a fuego en la cornamenta arrancada del primer demonio al que dimos muerte.

La primera tarea que me encomendó mi madre fue la de criar un licando, el cachorro de una loba fecundada por un tasugo. Nuestros licandos nos acompañarán durante la batalla. Sus serrados colmillos harán presa en las extremidades inferiores de los lusones, de las que no se separarán nunca, jamás. Las mandíbulas del licando permanecerán aferradas a los correosos tendones del lusón incluso después de que este haya separado la cabeza del cuerpo.

Preparamos nuestros cuerpos. Nos enfrentamos en largas jornadas de lucha con nuestros compañeros y hermanos.

En nuestro entrenamiento nos convertimos en nuestro enemigo. Impregnamos nuestros cuerpos con  guisehl, mejunje de placenta de vaca macerado con el hollín que las hogueras dejan a la entrada de nuestros hogares. Cuevas. Permanecemos con los ojos cerrados mientras nuestras mujeres untan con sus manos el guisehl cubriendo hasta el último rincón de nuestra piel desnuda. Olemos como ellos. Sujetamos fuertemente a nuestras cabezas, con tiras de cuero, las cornamentas arrancadas por nuestros antecesores a los lusones. Peleamos entre nosotros hasta conseguir desligar la cornamenta del adversario y caer exhaustos con ella en las manos. Para nosotros es como un juego de niños, pero sabemos que muchos de nosotros moriremos intentando arrancar los cuernos de un lusón. Así es como se quita la vida a un Hijo de Luzbel, mientras posean sus cuernos son inmortales.

También medimos nuestras fuerzas enfrentándonos a la encarnación de Ptah, el dios Toro. Corremos tras de ellos, los acorralamos y en un combate cuerpo a cuerpo, con nuestros brazos como únicas armas, desencajamos los cuernos de su osamenta. Toros negros como la noche. Intentamos darles una muerte honrosa, si es que alguna muerte lo es. Nosotros también sangramos. No somos inmortales, pero tampoco somos hombres. Somos los Hijos de Jonás.

Hombres. Espectadores de nuestras batallas a lo largo de los siglos. Ellos festejan el nacimiento de los Hijos de Luzbel con un rito llamado Khar-Navall. Se tiñen de hollín impregnado en aceite y se disfrazan con cuernos de buey en sus cabezas. En sus bocas colocan blancos tubérculos tallados que simulan las desgarradoras dentaduras de los diablos.  Corren por las calles de Luzón en una burla infame, gritando al son de los cencerros que penden de sus cinturas. Necios ilusos. Llegará el día en que nosotros no seamos los suficientes para poder aplacar la venida al mundo de los lusones y entonces será el fin de sus risas y burlas. Pero hasta que ese día llegué, los Hijos de Jonás mantendremos la tierra libre de esos diablos infernales.

Esta mañana hemos realizado nuestro bautismo de hielo en el río Tajuña. Estamos listos. Nos dirigimos al Ceño del Ojo. Ahí, los cercaremos en el desfiladero de rocas calizas. Junto a nosotros estarán rabiosos nuestros licandos, prestos a probar la sangre lusona.

Mañana comenzará la batalla que durará cuarenta noches. Somos pocos los Hijos de Jonás que quedamos vivos después de tantos siglos de lucha, pero los suficientes para creer en la victoria. Los lusones morirán y nosotros volveremos a nuestras cuevas portando sus cuernos como trofeos.

Mi nombre es Jonás Layna. Mañana será mi primera y última batalla.



 Publicado en el Fanzine "La Gallina" de Juan García Rodenas con motivo expreso del Reto Fanzine 2013 (Albacete)

viernes, 10 de enero de 2014

Coplero de Jotas de Ribazo y Picadillo de Rafa García. (Reto Fanzine 2013)


Para el Reto Fanzine 2013 (Albacete)  he publicado un Coplero de Jotas de Ribazo y Picadillo. Espero que se cante y sea de vuestro agrado.
Os dejo aquí el PDF con el libreto doble de impresión por si lo queréis imprimir a doble cara modo acordeón:






COPLERO DE JOTAS DE RIBAZO Y PICADILLO
(Rafa García para el Reto Fanzine 2013. 
Albacete)

DE MOZOS A MOZAS


Ya no quieres que te arregle
las flores de tu maceta,
eso es que tienes a otro
que cuando me voy las riega.

Tienes bonita la cara
y de cuerpo no andas mal
pero llevas más repasos
que los cabos de un bancal.

En las choperas te vi
mientras estabas meando
y soltaste un chorro niña
que llenaste to el barranco.

Dices que tienes, que tienes
un topo en el melonar,
ese topillo es tu primo
que te lo quiere sembrar.

Dame la mano Manuela
para subir a tu nido,
y a eso de los nueve meses
ya tendrás tu pajarico.

Ya se van los vendimiaores
ya se van por el camino
yo también vendimiaría
por debajo de tu ombligo.


Ayer tarde te lo vi
no querías enseñarlo,
lo tapabas con las piernas
y se le salía un colgajo.

Entre tus piernas yo estaba
y te hacía cosquillejas
más arriba me esperaba
el manojo de  collejas.

Esta tarde haremos fiesta
en la Casilla de Honorio
si te bajas las enaguas
te enseño mi repertorio.

Déjame coger los higos
que relucen en tu higuera
si están demasiado verdes
también cogeré las brevas.

Tienes el cabello rubio
también son rubias tus cejas
y también es rubia niña
la cera de tus orejas.

Allá va la despedida
con un choricico de  orza
toda la que lo ha probado
con el aceitillo goza.


DE MOZAS A MOZOS


Ya no quieres que yo vaya
a llevarte la merienda
eso es que tienes a otra
que se sabe más recetas.

Eres como los cadillos
que crecen en los ribazos
se te enganchan a las medias
cuando regresas del tajo.

Si no tienes quien te lo haga
yo te cavaré a ti el huerto,
dame tus  calabacines
y probarás mi pimiento.

La poda para ser buena
tiene que ser en menguante
y a ti Manolo te mengua
lo que tienes por delante.

Aunque te pongas perfumes
y te ajustes el sombrero,
llevas roña en las rodillas
que ni el palo un gallinero.

Dices que eres marinero
y que tienes un bajel
pero yo sólo te veo
echar la caña al Cabriel.

No me llenes el capazo,
de tomates y bajocas
lo que quiero es que te arrimes
y niño tu no me tocas.

Dices que tienes que tienes
un buen tinto cencibel,
pero lo que a mí me gusta
es el mosto del cimbel.

Dicen que tienes un cante
lo mismito que un jilguero,
para mí eres la gallina
cuando está poniendo un huevo.

En la cara tienes pecas
dos verrugas, mil lunares,
cuando te veo venir
me escondo en los olivares.

Cuando te veo en la cama
con los calzoncillos rotos,
recuerdo los calcetines
los calcetines del otro.

Allá va la despedida,
la que tengo en mi puchero
si le arrimas el hocico

ve preparando el babero.



martes, 7 de enero de 2014

RETO FANZINE 2013 - ALBACETE. LA GALLINA

RETO FANZINE 2013 - ALBACETE. LA GALLINA

(El pasado diciembre de 2013 tuvo lugar, un año más, la esperada edición del RETO - FANZINE  en Albacete. Esta fue una de mis colaboraciones para el Fanzine La Gallina del gran Juan García Rodenas)



Cuentos por telégrafo, o chistes por telégrafo, que sería lo más acertado. Elijo para el título lo de "Cuentos por telégrafo" en homenaje a Gianni Rodari y sus "Cuentos por teléfono". Rodari creó una serie de artificios de escritura creativa (no me gusta lo de poner creativa, pues la escritura libre ya es creativa per sé , pero en el mundillo educativo está muy de moda este apéndice, así que aprovecho la ocasión) dando rienda suelta a divertidas y curiosas situaciones que pueden darse en una conversación telefónica. Os voy a hablar de algo parecido, pero con el telégrafo como aparato analógico de comunicación.
Hubo un tiempo de chistes de mariquitas, de gangosos, de un español, un francés y un alemán, de tartamudos, de borrachos... pero no tengo constancia (y seguro que la hay) de un tiempo de chistes de telegramas. En mi pueblo hay varios ejemplos de chistes de telegramas convertidos en chistes locales, como podréis ver da mucho juego eso de juntar palabras porque salía más barato. Realmente no son chistes propiamente dichos, son pequeñas historietas de humor. Tratan de personas del pueblo a las que le sucedió realmente; pero perfectamente podría darse el caso de que fueran adaptaciones de una "moda" que se ha pasado por alto estudiar y registrar. Pues claro, a quién se le iba a ocurrir realizar un estudio de la creación, difusión y reacomodación de los chistes.
 ¿Quién hace los chistes? De niño recuerdo que las cintas de cassette naranjas de chistes de Arévalo poblaban los salpicaderos de los coches (junto a otras de realismo social barriobajero de Los Chichos, estas con un papel azul oscuro o marrón, o impresas directamente en el plástico como en el caso de Los Calis). Conocíamos las estructuras y luego cambiábamos los personajes y contábamos sus chistes con gente del pueblo. Transmisión oral vivita y coleando.
Quiero creer que algo así sucedió con los chistes de telegramas así que, por si esto no fuese cierto os voy a contar un par tal y como los recuerdo dejando el testimonio por escrito para la posteridad.





        
                                                          
"León Catalán y Pepe Isbert"

En mi pueblo hay un señor mayor que canta muy bien. León Catalán. En su juventud tuvo cierta amistad con el gran actor José Isbert (Pepe Isbert, cuyos padres eran de Tarazona de La Mancha, el pueblo de al lado) y alguna vez habían quedado para cantar o hacer teatrillos cómicos en pequeños casinos de la zona. Un día José Isbert  le propuso a León Catalán ir a Valencia a probar suerte con esto del artisteo. El tarazonero (o puchericho según la aplicación manchuela del gentilicio) era un poco mayor y tenía unos dineros pero León tuvo que pedir dinero a su padre. De esta manera se marcharon los dos con la firme creencia de poder subsistir viviendo en una pensión y actuando por los locales de variedades. Eran los grandes tiempos de artistas como Emilio El Moro y Finita Rufett.
Después de llevar quince días en Valencia los dos se quedan sin dinero. Isbert le dice a León Catalán que esto funcionaba así, que no habían tenido mucha suerte pero que había que  insistir y aguantar un poco más. Tenían dos salas apalabradas y a partir de eso todo sería coser y cantar. "Éxito seguro", repetía Isbert.
De esta manera León Catalán se va para la oficina de Correos y Telégrafos de Valencia y le envía a su padre el telegrama: "Padre- stop- Mandamásdinero - stop- Éxitoseguro".
Pasan tres días malviviendo, alguna actuación por unos cuantos duros, y por fin llega el dinero. Isbert le dice a León que podían aprovechar el dinero para comprase unos trajes y tener así mejor presencia, que eso hace mucho. Compran los trajes, pero las actuaciones que les salen son las mismas, más de nada. En una semana se acaba el dinero. León Catalán vuelve a la oficina y pone en el papel las palabras dictadas por Isbert: "Padre- stop -  vendemula -stop-vendecarro - stop - Mandadinero - stop - Éxitoseguro"
A los tres días llega el comunicado a la pensión de que se pasase por correos. Al llegar allí en vez del dinero se encuentra con un telegrama de su padre, que decía así: "Hijo - stop - venpacá - stop - ocojotrenpisocuellomato".
Así León Catalán se volvió al pueblo y Pepe Isbert se quedó un tiempo más en Valencia. El tiempo le dio la razón. EL Verdugo, Bienvenido Mr Marshall, La gran familia... "Éxitoseguro". 




                                                "El tractor de Vinaeras"

A Vinaeras le llegó la carta de incorporación al servicio militar. En ese mismo momento, preparó el petate se despidió de su madre y se marchó con el coche de línea a la estación de trenes de Albacete. En cuanto llegó a su destino se dio cuenta de que había salido de la casa con demasiadas prisas. Se acababan de comprar un tractor, un STEYR, al llegar del campo lo había dejado en el porchao de la casa pero con la marcha metida, tenía que avisar a su padre, así que desde la comandancia del cuartel le puso un telegrama: "Padre - stop - cuidao - stop - tractormarchametía".

Al día siguiente el cabo lo llamó, pues le había llegado respuesta: "Hijo - stop - hallegaotarde-  portásabajo - stop - albañilesencasa".
PDF Cuentos por Telégrafo